#CONOZCAMOS A ALEJANDRA ACOSTA

“¿Qué significa para ti ilustrar?” Fue una pregunta que compartiste entre quienes conforman la comunidad que has construido en redes sociales. ¿Qué significa para ti expresar/se entre bosquejos, dibujos y trazos? ¿Y qué hito dentro de tu trayectoria profesional te condujo a ser ilustradora?​

Para mí ilustrar significa desarrollar una mirada propia, más allá de la técnica o el lenguaje. Creo firmemente que cada proceso creativo es una forma de reflexión profunda y que ayuda a ir configurando esa mirada a través del tiempo.

El dibujo me acompañó desde la niñez hasta mi último año de carrera y todos los años que trabajé en diseño editorial lo tuve un poco abandonado. Llegó un momento en que la decisión se hizo inevitable y que coincidió con la maternidad.

Si ejercitamos la memoria y regresamos al tiempo de nuestra infancia ¿Qué cuento o escena recuerdas que te hayan leído de niña? ¿Y qué libro infantil o juvenil no debiera faltar en una biblioteca?

Hay un montón de libros que recuerdo con cariño, pero el que más me marcó y que todavía recuerdo con lujo de detalles es el cuento La pequeña vendedora de fósforos de la colección de Froebel Kan. La escena de las velas que flotan hacia el cielo convertidas en estrellas me conmueve hasta ahora. La forma delicada de nombrar a la muerte, los fondos oscuros, el comportamiento de la luz en las ilustraciones son cosas que me influenciaron mucho.

Si tuviera que elegir un libro, recomendaría Tarde de Invierno, de Jorge Luján y Mandana Sadat. Es un libro sencillo y bellamente ilustrado, que me produce una ternura infinita.

¿Cómo es tu relación con los libros, la lectura y la poesía? ¿Qué otras disciplinas creativas alimentan tu imaginario? ¿Cuáles autorxs o ilustradorxs constituyen hoy tu marco de referencia?

Amo leer. Precisamente por eso trabajo con libros y no en otras áreas de la ilustración. Leo mucho a Pizarnik, Clarice Lispector, Silvina Ocampo, Yasunari Kawabata y Didion.

Mis referentes vienen más del arte, el cine, la fotografía y la música. Generalmente mi inspiración es un híbrido de muchas frases, fotogramas y colores. Necesito salir de la ilustración para nutrir mi imaginario.

¿Cómo vas habitando el blanco, ese lienzo fértil en donde recae tu mirar, tu observación y por ende, los procesos creativos de tus ilustraciones? ¿Cómo vas determinando el tipo de técnica para comunicar esa idea, ese concepto a la hora de componer visualmente una obra?

Tengo una metodología que me ayuda a organizar mis ideas. Pero gran parte de mi proceso creativo se relaciona con la lectura y la búsqueda de elementos que me ayuden a aportar al relato desde mi mirada. Muchas veces es una fotografía, una textura, una melodía, una cita. Pequeños retazos que voy uniendo de a poco y que van armando un collage de ideas. La técnica aparece al final, cuando ya tengo claro cuál debería ser el tono del libro y está siempre relacionada al texto, a su temperatura, a la atmósfera que van dejando las palabras.

¿Qué libros relacionarías con los siguientes conceptos: planeta, raíces, pájaro, nube, lluvia, primavera?

Planeta: Sam y Leo cavan un hoyo (Editorial Juventud, 2014)
De Mac Barnett / Ilustraciones de Jon Klassen.

Raíces: El niño raíz (Lóguez Ediciones, 2015)
De Kitty Crowther.

Pájaro: El cuervo (Editorial Alfabia, 2010)
De Lou Reed- Lorenzo Matotti.

Nube: Tu mente es como el cielo (Editorial Amanuta, 2018)
De Bronwen Ballard / Ilustraciones de Laura Carlin.

Lluvia: Chubasco (Pequeño Editor, 2013)
De Cabrera.

Primavera: Estaciones (Editorial Kókinos, 2010)
De Blexbolex.

Entendemos que –por la crisis sanitaria– realizar clases presenciales se volvió complejo y se tuvo que buscar nuevas formas para ajustar la experiencia a formatos virtuales. ¿Cuál fue el mayor reto que te supuso a la hora de adaptar tus clases en las Universidades en las que trabajas? ¿Y el mayor descubrimiento? Por otro lado, ¿Cómo ha sido tu experiencia de compartir tus conocimientos en el curso “Experimentación gráfica para relatos ilustrados” en Domestika? ¿Cómo ha sido la retroalimentación de las y los alumnos?

Como mis ramos son prácticos y revisamos un montón de técnicas, tuve que idear un sistema para poder compartir mi mesa de trabajo en la pantalla a mis alumnas y alumnos. Sin duda el sistema de clases online conlleva más trabajo, porque el feedback es asincrónico en la mayoría de los casos, pero al mismo tiempo, significó un aprendizaje para todos y creo que ganamos en el foco en clases. En pantalla hay menos distracciones y conversa que en el taller, lo que nos permitió ser más eficientes con los tiempos de trabajo.

Mi experiencia como Profesora de Domestika ha sido increíble e inesperada. Estar en contacto con alumnos de diversos lugares del mundo y compartirles parte de mis procesos, es un lujo. Estoy muy agradecida de la retroalimentación que tiene el curso, ya van más de 6.500 alumnos y la evaluación sigue siendo 100% positiva.

En el libro publicado por Babel Libros “La mujer de la Guarda” (2016), que obtuvo el premio –New Horizons Bologna Ragazzi Awards 2017– en la Feria Internacional del Libro de Bolonia (Italia) ¿Cómo te enfrentaste al desafío de crear a través de doble páginas, un universo sombrío y azuloso, para dialogar con el texto de Sara Bertrand? ¿Tienes alguna escena que te haya sido más desafiante?

Todos los desafíos son interesantes, sobre todo a la hora de trabajar con una editora que es un referente, como lo es María Osorio. Ella veía la estructura del libro con mucha claridad, lo que me ayudó a crear con cierto nivel de seguridad.

Uno de los desafíos más grandes para mí fue integrar el color azul a mis collages después de varios años trabajando con rojo y negro, y de plantear un universo que fuera respetuoso con el texto de Sara Bertrand, pero al mismo tiempo aportara con una nueva mirada al relato.

En diciembre del año pasado, lamentamos el fallecimiento de Bárbara, de la querida editorial Barbara Fiore Editora, días más tarde nos enterábamos de “Inesperadas. Antología de poetas imprescindibles” (2020) ¿Cómo fue involucrarse en este proyecto? ¿Y cómo diste voz a las poetas seleccionadas por Paula Carbonell?

Bárbara era una editora muy reflexiva, siempre preocupada de cada uno de los detalles del libro. Y trabajar con ella significó un tremendo honor y también un aprendizaje para mí, sobre todo porque tenía una mirada respetuosa y generosa con mi trabajo y con la propuesta visual para el libro, que consistió en crear un relato silente que dialogara con el tono de los poemas contenidos en la antología. Supo integrar textos e imagen de forma delicada, complementando la lectura con un formato pequeño y bordes redondeados, convirtiendo a este libro en un objeto precioso.

En un año marcado por la pandemia y casi finalizándolo, lanzaste el libro para colorear “ATELIER”. ¿Cómo nace la idea de reunir creatividad, arte y expresión y ¿Cuáles fueron esos criterios que definieron la elección de los 20 artistas?

Es una idea que siempre me acompaña. No concibo mi trabajo sin honrar la influencia de estos artistas y sus miradas en mi propia obra, y por otra parte me parece que el atelier es ese espacio íntimo donde se gestan las ideas, donde ocurre la magia y me pareció interesante reunir estos conceptos dentro de un libro. La pandemia despertó una necesidad creativa en muchas personas y me pareció que un libro para colorear podría tener buena recepción. Para mí era importante que fuera más que un libro para colorear, sino que un objeto para detenerse, reflexionar acerca del proceso creativo y celebrar el arte.

Si tuvieras que elegir un libro particularmente especial dentro de la lista de tus libros ilustrados ¿Cuál sería?

Del Enebro, editado por Jekyll & Jill. Llegó de forma muy inesperada y se convirtió en mi libro más importante y querido. Ya llevamos varias ediciones y sigue recibiendo cariño de parte de los lectores.

¿Tienes alguna novedad que quieras compartir con nuestros lectores/as?

Estoy trabajando en varios proyectos, la mayoría para primeros lectores y eso es algo que me tiene muy contenta porque sentía que tenía una deuda con los lectores más pequeños. Estoy abordando la ilustración desde una nueva perspectiva después de haber trabajado durante muchos años con relatos más bien oscuros y difíciles, así que han sido meses de mucho entusiasmo creativo.

Por último, nosotras entendemos lo diverso como todo aquello que nos parece distinto a nuestra realidad y entorno. ¿Cómo lo entiendes tú?

Para mí la diversidad es riqueza absoluta.