#CONOZCAMOS A SANDRA CISTERNA – ACROMÁTICA

¿Cómo comenzó tu relación con los libros?

Creo que desde siempre he tenido un afecto especial por el papel, su materialidad y sobretodo sus infinitas potencialidades como soporte de ideas y emociones… al libro como objeto, creo recordar el motivo exacto, comenzó cuando estudiaba en la Universidad y me dieron un proyecto de taller la realización de una AUTOPSIA a un libro antiguo, la idea era reconocer todos los procesos gráficos realizados para la obtención final del volumen, esta búsqueda me condujo a una vieja tipografía en Valparaíso, donde se realizaban aún todos estos procesos, en modo mecánico pero bajo la supervisión de un experto, todo este mundo me conquistó inmediatamente, el cómo se hacía el trabajo de composición con la increíble Linotype, el proceso de impresión, los sonidos de las máquinas, el olor de la tinta tipográfica, era como si todo perteneciera a un mundo en el cual yo tenía que pertenecer. Fue cuando supe que ese sería mi camino.

¿Recuerdas cuál fue el primer encuentro con el mundo del libro experimental? No recuerdo un momento exacto, creo que mi encuentro con este mundo es sólo una evolución de todo, quiero decir que la experimentación ha sido una constante en mi trabajo, porque he aprendido en modo autodidacta, a través de la experimentación como base creativa.

¿Cuáles características crees que debe cumplir un libro para ser considerado un libro de artista?

Personalmente la denominación “libro de artista” no me gusta mucho, creo que en el último período ésta se ha banalizado o quizás solo  haya perdido su linea inicial, no lo sé… o quizás sea sólo que por estos días esta denominación está muy de moda y personalmente la moda no me gusta mucho… la cosa es difícil de explicar como decía al inicio, pero la pregunta era otra, creo que es bastante simple identificar los parámetros para reconocer o considerar a un libro como de artista, uno de los principales es el tiraje limitado, incluso de una copia única, esto le da valor y al mismo tiempo nos hace entender que ese libro fue hecho más como una obra de arte en forma de libro que como un libro tal. Otro parámetro sería la parte formal, o mejor dicho la posibilidad de controlar el formato y el número de páginas, que este libro tendrá, así como podemos controlar el tipo de material a utilizar, los cuales deben ser elegidos con cura, no hablo de materiales costosos o rebuscados, sino seleccionados para “ese” libro o para comunicar “esa” idea, es quizás este un punto crítico en mi dificultad de aceptar esta denominación, veo y he visto muchas exposiciones de libros de artista, que por intentar, hacer algo diferente, caen en una total banalización del concepto, donde no hay una coherencia entre contenedor y contenido, por ende, no comunica. ¿Cuál o cuáles obras han sido tu mayor inspiración?

No creo lograr individualizar una obra inspiradora, mas bien podría hablar de una cultura inspiradora, por un lado, creo que una de mis inspiraciones vienen de mi búsqueda personal de identidad latinochilenamericana emigrada en Europa, por otro lado creo que una de mis inspiraciones mayores ha sido la cultura Japonesa, en el arte de encuadernar, cuando entendí que la belleza de estas encuadernaciones, derivaban de la funcionalidad y de la utilización de los materiales, entonces entendí que por ahí quería llevar mi trabajo y eso es lo que hago hoy en día, creo que la coherencia es muy importante, no sólo en la creación de un libro sino en todo lo que uno hace.

¿Cuál fue tu primer proyecto relacionado con los libros experimentales? ¿Cómo abordaste su proceso de creativo? ¿Crees que el libro objeto cuenta una historia y por ende entrega otras posibilidades de lectura?

Respondo a estas tres preguntas como uno sola, ya que al menos para mi están relacionadas. Creo que mis primeros proyectos con libros experimentales podrían conectarse directamente a mi idea de la realización de cuadernos personalizados, fue este el modo en como me acerqué a la experimentación en el mundo editorial, porque comencé a interpretar necesidades de otras personas y darles forma de cuaderno, esto me sirvió y me sirve aún hoy como un modo de afrontar el proceso creativo, me apasiona la idea de hablar con las personas, intentar descubrir qué forma tiene en su cabeza ese cuaderno que me están pidiendo, para luego interpretar en una forma editorial eso que me han pedido, más aún si este objeto será para otra persona, un amigo por ejemplo. Cuando esa persona viene descrita, no como persona sino como usuario, en el cómo utiliza un libro o cuaderno, cuáles son sus pasiones o en que trabaja, cuáles son sus colores preferidos o simplemente dónde esa persona escribe o dibuja… es así como entendemos que un libro objeto DEBE contar una historia y DEBE entregar posibilidades diversas de lectura y manipulación, por la simple razón que todos y cada uno de nosotros lee, escribe, piensa, dibuja en forma distinta y única al mismo tiempo. Es una necesidad que estos objetos llamados libros comuniquen y hablen no sólo con su contenido como libro , sino además con su forma, con la textura del papel, con la forma que cada página tiene, con el tipo de hilo que sus páginas fueron unidas, con el cómo fueron unidas a través de una encuadernación funcional y coherente a su uso.

 ¿Cuéntanos acerca del proyecto Bestario Immaginato?

El proyecto Bestiario fue desarrollado por una Cooperativa compuesta por amigos y colegas. Ellos se ocupan de promover la lectura y de didáctica en la infancia. Un proyecto enorme que tiene inicio hace ya varios años, su historia ha tenido diversas formas y modalidades, pasando por el teatro, talleres, exposiciones y libros. Mi participación consistió en la proyección formal del prototipo de un libro, que luego fue producido. Era un libro objeto, interactivo, conformado por varias partes: cartas con huellas, mensajes secretos, un teatro desmontable, una hoja para hacer origami de un barco, etc. La idea era realizar un libro que pudiera ser utilizado en diversos modos, cuando se está en casa o cuando organizas un pic- nic. También el montaje. Todo hecho a mano, pieza por pieza, algunas partes eran impresas en cartón ondulado, otras fueron timbradas una a una, fue una gran hazaña, 1500 libros, numerados, cada uno un “pezzo unico”.

¿Cuéntanos cómo se ha entretejido tu historia con las máquinas y el oficio?

Se ha entretejido en modo lento y pausado, como la trama en una urdimbre, haciendo y des–haciendo, a son de pruebas y muchos, muchisimos errores; que poco a poco me han llevado a conocer a estas señoras máquinas, señoras no sólo por su gran magnitud, sino también por su edad y modo de trabajar. Cada una de ellas tiene una función específica y fue creada para cumplir esa función. Cada una de ellas, tiene su “maña” que la hace ser única y trabajar de un modo, creando así una identidad en cada pieza realizada. Mi oficio se basa en la fusión armoniosa entre mis ideas y la relación que tengo con ellas. Porque a pesar de ser grandes pedazos de fierro, a veces creo que perciben mis estados de ánimos, me ayudan y a veces me indican que es el momento de detenerme y seguir en otro… juntas podemos realizar grandes y pequeñas cosas, cargadas de significado y de detalles, ellas me ayudan, me enseñan, me condicionan pero siempre me dan directivas que intento seguir, con la idea de que seguramente la experiencia que ellas tienen, sólo pueden ayudarme.

 ¿Cómo ha sido la experiencia de dar workshops en cárceles en Udine?

Definir en pocas palabras todo lo que ha significado esta experiencia, es de verdad muy difícil. Primero porque no había pensado nunca que mi trabajo me llevara a conocer un mundo tan lejano y del cual era totalmente ignorante. Comencé sin tener ninguna experiencia y lo tomé como un desafío más, sin saber que esto cambiaría mi modo de ver y enfrentar tantas cosas de mi vida. He encontrado en estas personas grandes ganas de aprender, grande disposición y apertura, no sólo por el momento difícil que están viviendo. Muchas veces están cargados de dolor, de preocupación, de angustia, son personas que están viviendo un momento de vulnerabilidad, y por ende son frágiles, aunque intenten demostrar lo contrario. En un mundo como el nuestro donde todo está condicionado por el tiempo o peor aún por la falta de tiempo, donde corremos continuamente por cumplir con reuniones o entregas de proyectos, donde desesperamos porque nuestro computador o teléfono no se conecta inmediatamente, poder trabajar con personas que el tiempo lo tienen y no saben como utilizarlo, me parece increíble… No soy nadie para juzgar por las causas que los llevaron a estar ahí dentro, sinceramente los motivos por los cuales están ahí, me importa muy poco, sé que son personas que cometieron un error o tomaron una decisión equivocada y que están ahí a pagar ese error. Yo soy sólo otra persona igual que ellos, que se cruzó en su vida y ellos, en la mía, que compartimos un espacio donde les enseño algo, que quizás algún día les será útil o quizás no, de algún modo me siento como una ventana que por algunas horas les da algo de libertad.

¿Algún autor/a que haya marcado/inspirado especialmente tu carrera?

Si, cierto, no son conocidos ni famosos, pero que me han inspirado, marcado y sobretodo guiado, muchos, creo que mas que nada personas concretas que fueron mis maestros, en mi formación de lo que soy ahora, pero creo que la pregunta va más orientada a personajes, en ese caso podría nominar a Bruno Munari, como uno de mis inspiradores. Recuerdo que inspiró tantas mis búsquedas. Me maravilla cómo logra hacer converger en un discurso único, elementos que a simple vista parece que no tengan nada en común, mostrándonos que en todo lo que nos rodea, existe una coherencia y una armonía. Otra cosa que me gusta de su modo de trabajar, es la utilización de objetos cotidianos y simples en la representación y comprobación de sus teorías, creo que así nos acerca en modo ligero a argumentos complejos, logrando que elementos como la composición, la simetría o la comunicación, nos resulten mucho más simples y fáciles de entender. Analizando muchos de sus trabajos, podemos observar, cómo a través de su carrera, experimentó variadas áreas, convirtiéndolo en un “artista e designer “ donde la pregunta “ da cosa nasce cosa” viene respondida con una versatilidad de respuesta gráficas inconmensurables.

¿Cómo es un día en tu taller?

Nunca igual a otro. 

 ¿Tienes algún nuevo proyecto en mente?

¡Siempre! Ellos son mi motor, aunque lamentablemente no tengo mucho tiempo para realizarlos, porque normalmente realizo los proyectos de otras personas… mas busco siempre dar espacio a mis ideas. Tengo en el tintero una serie de proyectos, casi todos ligados a resolver problemas que se presentan en mi propia vida cotidiana, ligados casi siempre al transporte de elementos como el papel y que no encuentro objetos existentes que los resuelvan. Mi idea no es inventar nada de nuevo, sino mejorar las ideas ya creadas para resolver esos mismos problemas. Creo fervientemente que todas nuestras necesidades han ya sido resueltas, a lo largo de la historia del diseño, por lo tanto queda solo mejorar o modificar estos objetos, por lo tanto mis proyectos idealísticos, van desde una línea de  transportadores de papel en formato grande, pasando por una línea de sobres para carta,  a maletas de cartón para viajes en lowcost…